Cirujano Dentista, Universidad del Desarrollo. Periodoncia e Implantología UDEC. Diplomada en Atención odontológica para pacientes especiales.
La toxina botulínica, más conocida como Botox, al aplicarla a una parte específica de tu rostro, el músculo deja de recibir las señales nerviosas y al debilitarse ya no permite contraerse. Por lo mismo, los músculos de tu rostro en esa área se relajan y así hacen que las arrugas y líneas se suavicen. Se aplica principalmente en el tercio superior, frente, entrecejo, patas de gallo.